“Ecoparc”, herencia de José Ignacio Peralta Sánchez
Editorial
Algunos por desconocimiento y otros por ser cínicos y desmemoriados dejaron de lado a los verdaderos y únicos responsables de la privatización del zoológico del que fuera el “Parque Regional Metropolitano Griselda Álvarez”, son el ex gobernador José Ignacio Peralta Sánchez y los colaboradores de su administración, entre ellos el ex secretario de Administración y Gestión Pública, Kristian Meiners Tovar y el de Planeación y Finanzas, Carlos Noriega García.
Recordemos que fue en el año de 2016, en el mes de noviembre para ser más precisos, cuando el ex gobernador Peralta, como parte de una serie de propuestas y polémicos proyectos que pretendían convertir espacios públicos en lugares privados, anunció la decisión que en un inicio pretendía convertir el lugar en hábitat de más de 700 especies animales, esto al concesionar 20 hectáreas del “Parque Regional Metropolitano Griselda Álvarez”, a título gratuito a la empresa Fiesta Safari, propiedad del controvertido empresario José Ernesto Zazueta.
De nada sirvieron las protestas de organizaciones animalistas, así como de Leoncio Morán y ciudadanos que se sumaron al rechazo de que fuera entregado un emblema del patrimonio ambiental, cultural y de convivencia social de los colimenses, a un empresario que desde aquellas fechas era conocido por tener un negro historial de compromisos incumplidos y acusaciones de maltrato animal.
Tal decisión fue aplaudida y respaldada por algunos que hoy se muestran indignados, que cuestionan al actual Gobierno de Colima y a la gobernadora por no hacer algo para evitar lo que ha venido sucediendo.
Sin embargo lo que vale la pena precisar, es que los únicos responsables de todo lo ocurrido con las especies animales que originalmente habitaban en el lugar, así como con las que después se incorporaron al zoológico, son el ex gobernador José Ignacio Peralta, quien por cierto espera ser llamado a cuentas por la justicia, y el propietario de la empresa Fiesta Safari, José Ernesto Zazueta, quien se benefició de una concesión apresurada y colmada de privilegios.
Con respecto al tema lo más importante son dos cosas: la primera, es que el Gobierno de Colima informe cómo va el proceso para revocar la concesión; y la segunda, que las dependencias encargadas de vigilar el manejo y resguardo de la fauna silvestre, PROFEPA y SEMARNAT, compartan con la opinión pública una opinión sobre las diversas denuncias difundidas en redes sociales sobre la alimentación deficiente, descuido y maltrato que padecen los animales resguardados en el zoológico, y a su vez que aclaren sobre su posible traslado a otro sitio.
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